Juan Carlos Sarmiento (J.C.) y María Carratalá (M.C.) son los gerentes de Carratalá y Sarmiento Estilistas, empresa localizada en Sant Joan d’Alacant en la C/ Mercat, nº 8. Al llegar nos recibieron e hicieron pasar al salón para poder estar más tranquilos y mitigar los nervios. Una vez dentro comenzamos la entrevista y les propuse que se presentaran ellos mismos y que nos hablaran de sus experiencias laborales, formación académica, etc.

M.C: Soy Alicantina, estudié en la academia Galera y cursé el grado superior en el I.E.S. del Plá en Alicante. He trabajado en diferentes peluquerías y centros de belleza de toda la provincia desempeñando tareas desde auxiliar a oficial, y hasta llegar a ser gerente y desempeñar mi función en esta empresa.
J.C: Soy de aquí, Sant Joan d’Alacant, mi formación la lleve a cabo en la academia Pedro Molina, también he realizado varios cursos de formación en Barcelona y Madrid relacionados con el mundo del estilismo y la peluquería. En cuanto al ámbito geográfico laboral he trabajado en varios municipios de la provincia Alicantina y gracias a eso he conocido a María coincidiendo como compañeros en varios salones y empresas. El compartir un mismo concepto de asesoramiento de imagen y peluquería, fue lo que nos trajo hasta aquí, una actualidad laboral en la que podemos decir que somos nuestros propios jefes y hacemos lo que más nos gusta.

Cuándo les preguntamos por el origen de la empresa respondieron lo siguiente:

M.C: “Carratalá y Sarmiento Estilistas surge un domingo de ramos que nos encontramos y llevábamos varios meses sin saber el uno del otro. La peluquería en la que estaba Juan Carlos cesó su actividad y me comentó medio en broma y entre risas tengo que hablar contigo para ver si hacemos algo juntos. Y…”
J.C: “…Y su padre que estaba con nosotros ese día nos propuso que le contáramos esa idea para ver de qué forma podríamos hacerla realidad. Y eso hicimos, diseñamos un plan de empresa que fuera factible y real, que fuéramos capaces de llevarlo a buen puerto. Y su padre nos ayudo en muchos aspectos relacionados con la financiación y demás papeleos. Él nos facilitó que pudiéramos ver que era más fácil de lo que nosotros pensábamos.

Definieron su empresa como algo más que un trabajo técnico, ofrecen algo distinto. La amplia formación y experiencia en el sector les ha llevado a aplicar todos esos conceptos formativos en maquillajes, tratamientos faciales, indumentaria, cosmetología, etc. a cada servicio con un trato personalizado para cada cliente. “Los tratamientos que hacemos van más allá de recomendar un champú para la caspa. Ambos tenemos una trayectoria dentro del campo de los peinados y asesoramientos de belleza en novias, cargos de fiestas, damas y reinas, bellezas y damas de hogueras y eso te lleva a adquirir y desarrollar unas tablas dentro de este sector. Nos implicamos junto a ell@s en que todo salga bien lo que te lleva a acompañarlas a los diferentes actos que hagan, pruebas de maquillaje, pruebas de peinado y de vestuario conjuntas para perfilar esos detalles que puedan mejorarse. Trabajamos desde tocados y peinados para novia, postizos para trabajos especiales, recogidos de fantasía para moros y cristianos, recogidos del s.XVIII, moños de bellezas, tratamientos de maquillajes, etc.”

Juan Carlos y María se asociaron y abrieron el negocio en 2011. Les preguntamos por la evolución laboral de la empresa durante estos 3 años que llevan trabajando juntos, y nos explicaron que pese a la situación económica que atraviesa gran parte de la sociedad, su evolución laboral como empresa ha sido positiva. Ha sido un paso a paso progresivo, sin prisa pero sin pausa y muy contentos porque desde que abrieron no han parado de trabajar.

-¿Cómo habéis llegado a conseguir eso, qué es lo que os distingue de otros?

“La calidad del producto que utilizamos es determinante en el resultado final del trabajo, es uno de los puntos de nuestro decálogo que cumplimos sí o sí. La disposición del trato y servicio que das ha de ir acompañado de un producto de alta calidad. El público habitual de nuestro salón viene porque se siente a gusto. Están cómod@s con nosotr@s y con la decoración del salón y ven que trabajamos con productos de calidad acordes al servicio que les prestamos.
Otra cosa es que la especialización y trayectoria que tenemos en el tema del postizo sea un signo de distinción respecto a otros centros de belleza que no lo ofrecen.

No hemos parado de formarnos y estudiar continuamente para evitar estancarnos y hacer siempre lo mismo. Al año solemos viajar 3/4 veces a ciudades como Barcelona, Madrid, Murcia y Valencia para realizar estos periodos de formación. Participamos de forma continua en varias campañas y promociones que realiza la asociación de comerciantes de Sant Joan d’Alacant, tenemos una tarjeta de fidelización de clientes que incluyen descuentos. Y también formamos parte del convenio con las AMPAS de los colegios e institutos de Sant Joan, a los que se les aplica un porcentaje de descuento en el servicio".

A la pregunta ¿Qué es lo que más os gusta de vuestra profesión? Argumentaron que lo que más les gusta es todo lo que conlleva. “Existen profesiones que se rigen por una vocación y formación muy completa. Una empresa que se dedica al estilismo no puede dejar de lado la pasión y profesionalidad con la que realiza su trabajo. Por eso nosotros entendemos que debes darlo todo, bien desde el trato cercano y humano con el cliente, al proceso creativo y técnico que puedas hacer para ese trabajo en concreto. Nos encantan las clientas atrevidas que se dejan hacer y ponen toda su confianza en tus manos, y por supuesto ver el resultado final reconforta mucho. Sobre todo cuando ves que el/la client@ sale con un mejor estado de ánimo y apariencia a como entró. Le hayas prestado un simple servicio técnico o un recogido de novia, o simplemente hayas mantenido una conversación distendida con él/ella”.

Para finalizar el encuentro les pedimos que nos hicieran una breve descripción de los pasos que se compone su proceso de creación para un peinado de novia. Desde la primera toma de contacto con el/la cliente hasta el día del enlace o acto. Y nos contaron lo siguiente:

“La 1ª toma de contacto con la clienta suele ser de 6 meses a un año de antelación a la fecha del enlace. Ese mismo día solemos hacer el análisis visual de los rasgos faciales de la novia para poder sacar un esbozo del estilo de esa persona. Pedimos una fotografía del vestido que lucirá para ver qué línea de estilismo sigue, el tejido de éste, etc.
Se cita al cliente para que acuda al salón 2 semanas después y presentar las diferentes propuestas realizadas por nosotros. Previamente en la elaboración del diseño del peinado, se piensa en ese vestido, en esa persona y se crean varias propuestas para ofrecerle. Consultamos con ellas si tienen algo en mente que les gustaría hacerse, alguna manía concreta respecto a los peinados y maquillajes, si es alérgica a algún cosmético. Aconsejamos no encargar ni hacer ningún tipo de tocado o adorno para el cabello hasta que no se determine el diseño de peinado final. Es habitual acompañarlas a las pruebas de vestido y maquillaje para comprobar cómo quedaría el resultado final del peinado. Contactamos con la floristería en cuestión por si el tocado lleva flores naturales. Se ayuda a todo en general porque es necesario que todo forme un conjunto".

"Cuándo nos llaman para felicitarnos por nuestro trabajo nos produce una enorme satisfacción saber que todo ha salido bien. Además hasta que no te llaman estás preocupad@ y con malestar en el estómago.  Ten en cuenta que te han elegido a ti para que ese día seas partícipe del evento más especial e importante de sus vidas. Con lo cual la responsabilidad y satisfacción personal van de la mano en el resultado final".

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